La compañía de periféricos Kensington alerta de que, además del robo en sí del portátil, la mayor pérdida se produce por la información que está dentro, en muchos casos confidencial, como contraseñas, datos de otras personas, etc.
Las recomendaciones para evitar el robo son las siguientes:
1. No llamar la atención, llevar el portátil en una bolsa o mochila que no alerte sobre su contenido.
2. La mayor parte de los portátiles cuentan con un puerto para candados que se conecta a un cable de acero para proteger y asegurar su portátil.
3. Cuidado con los lugares públicos.
4. No dejar a la vista el portátil, aunque sea en la habitación de un hotel. Si lo vamos a dejar en el coche deberemos cubrirlo o esconderlo debajo del asiento o maletero.
5. Poner una etiqueta casera en su portátil, indicando el teléfono y la dirección en la que ponerse en contacto para poder devolver el equipo, por si la persona que lo encuentra quiere devolverlo.
6. Anotar el número de serie del portátil, y hacer una marca de identificación para ayudar a identificar el sistema en caso de robo.
7. Verificar el seguro para saber si cubre el robo del portátil y si no es así añadirlo o tener la posibilidad de contratarlo.
8. Hacer una copia de seguridad de los datos más sensibles. Lo ideal es hacerlo de forma periódica ya que ciertos datos suelen valer mucho más que cualquier portátil a la venta.
9. También hay soluciones para encadenar el portátil, durante una conferencia, por ejemplo.
10. Existen también soluciones profesionales de seguimiento y recuperación de ordenadores portátiles, a través de etiquetas RFID y otros métodos más sofisticados.